En España los auxiliares veterinarios carecen de una regulación profesional lo que les provoca que existan grandes diferencias salariales y desempeñan todo tipo de funciones en la clínica veterinaria.
Sin embargo, en Reino Unido esta misma figura, conocida como enfermeros veterinarios registrados (RVN, por sus siglas en inglés) cuentan con una regulación y un reconocimiento mucho mayor que en España. Si bien, la Asociación Veterinaria Británica (BVA, por sus siglas en inglés) está luchando porque se les reconozca aún más y han lanzado el mes de la concienciación de la enfermería veterinaria con el que pretenden darle valor a los enfermeros veterinarios y apoyar la expansión de sus funciones dentro del equipo dirigido por el veterinario.
Así, la BVA, junto a la Asociación Británica de Enfermería Veterinaria, ha emitido una serie de recomendaciones a mejorar sobre el papel de los enfermeros veterinarios. En primer lugar, resaltan los beneficios de incorporar el rol de Persona Adecuadamente Calificada en la práctica de animales pequeños, animales de granja y equinos para ampliar su función en la provisión general de anestesia.
También solicitan que se les considere como prescriptores de tratamientos habituales para pulgas y lombrices, y el manejo de los casos crónicos bajo supervisión veterinaria.
En el entorno de un zoológico, BVA reconoce el papel potencial de los RVN en la administración de medicamentos anticonceptivos, el monitoreo antihelmíntico y el tratamiento y la administración de vacunas, después de una evaluación veterinaria inicial.
Las recomendaciones de la BVA reconocen que la profesión está operando en un entorno que cambia rápidamente, incluida una expansión en el rango de profesionales aliados, inquietudes con respecto a la escasez de personal veterinario, innovaciones tecnológicas y cambios en las expectativas de los dueños de mascotas, ganaderos, industria y otros clientes.
Para abordar estos cambios y aclarar dónde se encuentra la responsabilidad de un paciente y cómo se comparte entre veterinarios y enfermeros, desde la BVA indican que el veterinario, como líder, debe coordinar los servicios con sus enfermeros; regular la obligatoriedad del diagnóstico y la supervisión por parte de los veterinarios y el acceso adecuado a los registros veterinarios como requisitos previos antes del tratamiento; y consultar con el veterinario sobre cualquier cambio regulatorio que pueda surgir como resultado de una innovación tecnológica o de otro tipo.
GRAN APOYO POR PARTE DE LA ASOCIACIÓN VETERINARIA BRITÁNICA
El presidente de la BVA, Simon Doherty, resalta que los enfermeros veterinarios “hacen una contribución invaluable al éxito médico y quirúrgico de los animales. Sabemos que la mayoría de los veterinarios tienen confianza en la regulación actual de las RVN, pero nos gustaría ver el título de 'enfermero veterinario' protegido en la legislación, en interés de la salud y el bienestar de los animales y subrayar la confianza en el profesionalismo de los enfermeros veterinarios”.
“Respaldamos por completo un marco de progresión profesional para los enfermeros veterinarios en todas las áreas de práctica, y especialmente promover carreras en la práctica equina y de animales de granja donde su capacitación es actualmente inadecuada”, añade.
“Un equipo eficaz y eficiente dirigido por veterinarios con funciones claras y ampliadas para enfermeros veterinarios puede ayudar a mejorar la salud y el bienestar de los animales, mejorar la atención al cliente y un uso más eficaz de las habilidades dentro de la profesión veterinaria. Dada la escasez de mano de obra en curso, una fuerza de trabajo veterinaria fortalecida también tiene el potencial de aliviar las preocupaciones de contratación y retención de veterinarios", concluye.