La sincronización del estro es importante para el manejo óptimo de la reproducción en granjas porcinas. Los criadores de cerdos utilizan comúnmente hormonas sintéticas para sincronizar los ciclos estros en las cerdas primerizas, es el caso de los tratamientos hormonales, como los progestágenos sintéticos, pero existe una creciente demanda de herramientas de reproducción alternativas no hormonales, debido a que su uso resulta contaminante para el medio ambiente por las hormonas y sus metabolitos en el estiércol y la orina.
Antes de la pubertad, las cerdas primerizas presentan un "período de espera", relacionado con el desarrollo ovárico y las secreciones de gonadotropinas, durante el cual las estimulaciones externas, como la exposición al verraco, pueden inducir y sincronizar la primera ovulación. Si bien, los expertos señalan que faltan herramientas prácticas no invasivas para la identificación de este período en
granjas.
Por lo tanto, la identificación de biomarcadores en este período de receptividad permitiría la detección del tiempo óptimo para la aplicación del “efecto verraco” en cerdas prepúberes. La orina y, más claramente, la saliva son de fácil acceso y se pueden tomar muestras de forma no invasiva, sin estrés ni dolor.
Por ello, científicos del Instituto Nacional de la Investigación Agronómica de Francia se propusieron realizar un estudio para buscar biomarcadores específicos del "período de espera" en la saliva y la orina.
En total, nueve primerizas de 144 a 147 días de edad fueron sometidas a ecografía transabdominal tres veces por semana durante 5 semanas hasta la detección de la pubertad.
Según explican, “el análisis metabólico permitió la identificación de 23 metabolitos de bajo peso molecular en muestras salivales y 42 en muestras de orina. En la saliva de primerizas, identificamos seis metabolitos como biomarcadores candidatos del período pre-pubertad”.
Estos resultados muestran que el muestreo indoloro de saliva podría ser una herramienta no invasiva para la identificación del estado hormonal fisiológico de las cerdas jóvenes y posiblemente el momento óptimo para la aplicación del "efecto verraco". “Esto podría contribuir a sincronizar el estro y, por lo tanto, a desarrollar herramientas de mejoramiento no hormonales”, concluyen.