Vithas Red Veterinaria, el laboratorio del grupo Vithas que analiza muestras de pequeños y grandes animales en su sede de Vigo, espera que la nueva vacuna contra la leishmaniosis permita frenar la expansión de la enfermedad, toda vez, que en los últimos ocho años se ha multiplicado por 200 el número de casos de este patógeno.
Según la responsable del laboratorio de Veterinaria de Vithas Red, Ana Pérez Creo, “la vacunación masiva es la mejor barrera para la expansión de la enfermedad, ya que no sólo reduce los casos de animales enfermos, sino que impide que éstos actúen como transmisores de la enfermedad a otros animales”.
La industria farmacéutica española ha anunciado que ya puede empezar a comercializar la primera vacuna con tecnología ADN frente a la leishmaniosis canina. Desde la sección de Veterinaria de Vithas Red Diagnóstica advierten que antes de poner esta vacuna, es conveniente constatar que el perro no ha estado en contacto con la enfermedad.
PUEDE TRANSMITIRSE A HUMANOS
La leishmaniosis es una enfermedad parasitaria provocada por Leishmania spp. un parásito protozoario que se disemina por la picadura de un mosquito flebótomo infectado. Afecta fundamentalmente a perros (que actúan como reservorios y diseminadores), pero puede llegar a afectar a los humanos. Según un estudio del Centro Nacional de Epidemiología del Instituto Carlos III relativo a la leishmaniasis en España entre los años 2019 y 2021 publicado el año pasado, la incidencia fue estable entre 2016 y 2019, con un marcado descenso en 2020 debido, fundamentalmente, al confinamiento. En este periodo se registraron 1.041 casos autóctonos en toda España. A ellos se le suman otros 33 casos importados (cuyo contagio no se produjo en territorio español).
Recientemente, el laboratorio Zendal, que ha trabajado con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas en el desarrollo de esta vacuna, ha anunciado que ya está en disposición de comercializar la primera vacuna para perros basada en ADN recombinante para hacer frente a la leishmaniosis canina.
Desde la sección de Veterinaria de Vithas Red Diagnóstica se considera importante realizar una analítica al animal antes de su vacunación, para constatar si ha tenido contacto o no con la enfermedad.
Así, la doctora en Veterinaria Ana Pérez Creo, responsable de la sección de Veterinaria de Vithas Red Diagnóstica, cree que el incremento de leishmania en animales se puede deber a varios factores, entre los que cita el cambio climático que hace que las temperaturas en invierno no bajen de los 10 grados (umbral a partir del cual los mosquitos flebótomos deben invernar) y favorece la supervivencia de larvas.
Por ello, entiende que es una enfermedad en expansión que, en el caso de Galicia es endémica en algunas áreas de la comunidad como las Rías Baixas y en Ourense. Así, recuerda que la Real Sociedad Canina de España asegura que en los últimos ocho años el número de perros que en Europa se ha infectado de leishmania se ha multiplicado por 200, superando los nueve millones de canes enfermos.
DIAGNÓSTICO DE LA LEISHMANIOSIS
Al igual que sucede en salud pública, las mejores campañas de prevención de la leishmaniosis en perros son las campañas de detección precoz, que permite hacer un seguimiento eficaz de su posterior evolución.
En zonas endémicas y adyacentes, los chequeos generales de salud de los perros deberían incluir, al menos, un test rápido que detecte anticuerpos frente a este parásito. Este tipo de pruebas permiten confirmar, con una alta probabilidad, que un resultado negativo en un perro asintomático es un animal sano.
Ante un resultado positivo, es aconsejable realizar pruebas adicionales que se deben de analizar en laboratorios especializados y con las debidas garantías. Para ello, Ana Pérez Creo aconseja una valoración del estado general del can que incluya un hemograma, perfil bioquímico completo incluida la función hepatorrenal y urianálisis para definir correctamente las posibles alteraciones clínico-patológicas que puede causar la infección.
También se debería realizar una prueba serológica que permita la medición de la titulación de anticuerpos del animal frente a la enfermedad mediante las técnicas ELISA o IFI y una electroforesis de proteínas séricas o proteinograma. Esta última prueba permitirá evaluar el nivel de reacción del perro a la enfermedad y será una buena herramienta para monitorizar la evolución después del tratamiento.
Los laboratorios especializados también pueden realizar una analítica de la proteína C reactiva, ya que un índice alto de esta proteína augura un peor pronóstico. Esta determinación permitirá, también, valorar la estabilización del animal.
Por último, los laboratorios veterinarios pueden realizar una PCR, que resulta muy útil en los casos en los que la infección es muy temprana y el animal “aún no ha seroconvertido” y por lo tanto, los análisis no van a detectar anticuerpos. Del mismo modo, esta determinación “nos permite analizar una gran variedad de tipos de muestra según las lesiones que presente el animal”.
La responsable del laboratorio de Veterinaria de Vithas Red Diagnóstica señala que “numerosos estudios demuestran una sensibilidad y especificidad alrededor del 100 % en la detección de Leishmania spp. en la médula ósea. Sin embargo, en las muestras de sangre la sensibilidad baja a valores del 60 y 80 %”.
Ana Pérez Creo recuerda que la leishmaniosis no tratada termina causando la muerte del animal, por lo que la mejor prevención es evitar el contacto. Para ello, además de la vacuna, que debe de aplicarse a animales sanos, existen además pipetas y collares con sustancias repelentes de mosquitos, y estimuladores de la defensa celular del animal que reducen el riesgo de infección.
En este contexto, considera que la primera vacuna canina basada en ADN recombinante es un claro ejemplo del concepto “One Health” promovido por la Organización Mundial de la Salud que se base en un enfoque integral y unificador cuyo objetivo es equilibrar y optimizar la salud de personas, animales y ecosistemas.