Promover estrategias de atención médica dirigidas a poblaciones humanas y animales al mismo tiempo puede ahorrar dinero y tiempo a los servicios de atención médica, según el nuevo estudio realizado por científicos de la Escuela Paul G. Allen de Salud Animal de la Universidad Estatal de Washington.
Los investigadores trataron las infecciones por lombrices intestinales en humanos durante su campaña regular de vacunación de perros para eliminar la rabia en 24 aldeas tanzanas.
Instalaron en ocho pueblos clínicas para tratar la lombriz intestinal en humanos, en otros ochos clínicas para vacunar contra la rabia en perros y otros ocho tuvieron clínicas integradas para hacer ambas cosas al mismo tiempo.
Los expertos detectaron que en las aldeas con clínicas de salud integradas el 91,5% de los hogares de las aldeas recibió tratamiento contra las lombrices intestinales, mientras que en el caso que había clínicas donde únicamente se administraba el tratamiento para humanos tan solo acudió el 82,5% de los hogares.
En el caso de las vacunas contra la rabia, las clínicas de salud integradas recibieron al 86,5% de los hogares, en comparación con el 90% de los hogares que acudieron cuando las vacunas contra la rabia se ofrecían en clínicas destinadas únicamente para ello. Durante las discusiones grupales con los asistentes a la clínica, el 85% aseguró que las clínicas integradas resultan un “dos por uno” en tratamientos de salud.
Además de reducir el tiempo para aquellos que tendrían que viajar a dos clínicas de salud diferentes, hubo ahorros significativos de costes al combinar las intervenciones para ambas enfermedades.
"Necesitamos estrategias de control novedosas, rentables y complementarias para tratar de abordar estas enfermedades tropicales desatendidas", señala Felix Lankester, profesor asistente clínico e investigador principal del proyecto. "Este estudio es importante porque muestra que un enfoque de One Health puede reducir los costes y llegar a más personas".
Las plataformas One Health Delivery, como la que implementaron los investigadores de Global Animal Health en Tanzania, podrían desempeñar un papel importante en la campaña global de la Organización Mundial de la Salud para poner fin a la carga de enfermedades tropicales desatendidas para 2030.