El Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España (CGCFE) ha emitido un comunicado ante la “gran preocupación del debate público emprendido por la Asociación de Veterinarios Especialistas en Équidos (AVEE) y el Colegios de Veterinarios de Madrid (Colvema), en el que se tacha de intrusos a los fisioterapeutas, sin medir las consecuencias que para nuestra profesión supone, en cuanto a deterioro y desprestigio de nuestra imagen profesional”.
“Desde el CGCFE consideramos este hecho como muy grave e impropio de otro colectivo profesional sanitario, contemplado en la LOPS, que en unos de sus capítulos fomenta la colaboración entre las distintas profesiones implicadas a través de pactos ‘de forma no conflictiva, sino cooperativa y transparente’”, señalan.
El Consejo General de Fisioterapeutas manifiesta que, desde el momento en el que se puso en duda la competencia de la fisioterapia animal ejercida por fisioterapeutas, abogó por el diálogo, alejándose de la confrontación, para evitar hacer público un problema interdisciplinar que entiende que se tiene que resolver en foros profesionales, porque lo contrario debilita y desacredita a ambas disciplinas y crea desconcierto e inseguridad en el ciudadano.
Según explican, la fisioterapia animal se viene desarrollando en España desde hace muchos años, en colaboración con los veterinarios, “como así viene ocurriendo en otros países”. Ante la puesta en duda de su legalidad y competencia en los últimos años, el Consejo General indica que se vio motivado a consultar a un despacho de abogados de prestigio, al Ministerio de Sanidad y de Educación, “no existiendo inconveniente alguno en que los fisioterapeutas puedan seguir ejerciendo con su intervención profesional; no para diagnosticar y tratar enfermedades si no, de forma colaborativa, para ayudar a los animales a recuperar movimientos y funciones perdidas y contribuir a mejorar el dolor. No existen, legalmente, competencias exclusivas que obstaculicen o prohíban a los fisioterapeutas ejercer su actividad profesional en animales, como asimismo pueden hacerlo los veterinarios”.
Por otro lado, “este Consejo no acepta, bajo ningún concepto, el secuestro, por parte de los veterinarios, del nombre de nuestra profesión ‘Fisioterapia’ o ‘fisioterapeuta’, confundiendo una disciplina con una ‘formación’ especializada, a través de títulos propios que no proporciona nuevas competencias”.
Por último, piden el cese “inmediato” de esta confrontación a favor de abrir un proceso de diálogo.