Los científicos del Instituto Pirbright han identificado proteínas del virus de la peste porcina africana (ASFV, por sus siglas en inglés) que pueden desencadenar una respuesta inmunitaria en los cerdos. Los expertos esperan desarrollar una vacuna utilizando estas proteínas que sea capaz de proteger contra esta enfermedad mortal.
Publicado en Frontiers in Immunology, el estudio muestra que cuando algunos cerdos fueron desafiados con una cepa virulenta de ASF después de recibir una vacuna que incluía las proteínas identificadas, se redujo el nivel de virus en la sangre. "Esto demuestra que este método de vacunación podría brindar una protección efectiva a los cerdos, aunque se necesita más trabajo", asegura el Dr. Chris Netherton, jefe del Grupo de Vacunología de ASF en Pirbright.
Para determinar qué proteínas ASF deberían usarse en la vacuna, el equipo buscó aquellas que activaban las células inmunitarias en cerdos, que previamente habían sido infectadas por una forma debilitada de ASFV. Las 18 proteínas que generaron la mayor respuesta de las células inmunitarias se transfirieron a vectores virales; los virus que entregan las proteínas ASF a las células de los cerdos, pero no son dañinos para los animales.
“El ASFV tiene más de 150 proteínas; entender cuál de estos desencadena una respuesta inmune es difícil pero crucial para crear este tipo de vacuna. Ahora que hemos identificado proteínas que activan las células inmunitarias de los cerdos, podemos trabajar en la optimización de los componentes de la vacuna para garantizar que los animales estén protegidos contra las cepas virulentas de ASF ", agregó Netherton.
La peste porcina africana (PPA) infecta a todos los cerdos y jabalíes y puede causar fiebre, pérdida de apetito, vómitos y diarrea con sangre. La enfermedad suele ser mortal, con algunas cepas que se acercan a las tasas de letalidad del 100%. Aunque el virus no causa enfermedades en los seres humanos, representa una amenaza importante para la seguridad alimentaria y tiene un impacto sustancial en la economía, especialmente en el comercio y la ganadería. La peste porcina africana ya ha provocado el sacrificio de más de 1,1 millones de cerdos en China y casi 2,5 millones de cerdos en Vietnam.
Las medidas de eliminación, cuarentena y bioseguridad son actualmente las únicas defensas que los ganaderos pueden usar para prevenir la propagación de la PPA. Por lo tanto, el desarrollo de una vacuna segura y eficaz es vital para prevenir la transmisión de la PPA y es cada vez más urgente, considerando la rápida propagación de la enfermedad en Europa y China. Hay varios tipos de vacunas contra la PPA en las que se está trabajando, pero se sabe relativamente poco sobre el virus y cómo responde el sistema inmunológico, lo que dificulta la progresión.
Las vacunas fabricadas con virus inactivados no han ofrecido protección a los cerdos domésticos, y aunque las vacunas vivas atenuadas (que contienen versiones debilitadas de un virus vivo) son prometedoras para la protección, se necesitan más pruebas para garantizar su seguridad. Por lo tanto, los investigadores de Pirbright esperan que estas vacunas vectoriales proporcionen una alternativa, que podría ayudar a controlar la propagación de esta devastadora enfermedad porcina.