La tecnología 3D llega a la veterinaria

Gracias a los avances tecnológicos de los últimos tiempos, la sociedad ha avanzado a pasos agigantados, y prueba de ello es el beneficio que el mundo veterinario ha obtenido, consiguiendo así salvarles la vida a numerosos animales con la utilización de impresoras 3D.

Investigadores de la Escuela Politécnica superior de Zamora de la Universidad de Salamanca han realizado un proyecto que permite diseñar prótesis a medida para mascotas a través de la impresión 3D.

La solicitud de una clínica veterinaria salmantina para curar la pata a una de sus gatas, hizo que surgiera la idea de llevar a cabo el proyecto, en el que varios expertos fueron los responsables de poder realizar un molde que permitiera crear a partir de ensayos, una nueva extremidad para la felina.

Otro de los avances en este campo fue la creación de un implante que hizo posible que un perro con tumor en la mandíbula pudiera ser trasplantado. Tanto el diseño como la fabricación, tardaron tan sólo 14 días respectivamente.

Además de estos, existen otros muchos casos de implantes a animales como es el del perro salchicha llamado Patches, que también fue operado, pero esta vez para trasplantar casi las tres cuartes partes de su cráneo a causa de un cáncer, por manos de una de las doctoras de la Universidad de Guelph.

MÁS ALLÁ DE LOS IMPLANTES

Y es que estos avances no sólo se limitan a la creación de implantes, pues Prometheus, una empresa fundada por expertos de la Universidad de Parma, ha logrado crear una impresora biológica 3D capaz de modelar células humanas. A pesar de no estar preparada todavía para usar con humanos, en el mundo animal ya ha obteniendo muy buenos resultados. Mediante muestras de sangre, Ematik, nombre del primer producto de Prometheus, crea una segunda piel agilizando así el proceso de curación de heridas.